Intervino la gendarmería en panamericana
Desalojaron un corte por Lear
Trabajadores de la autopartista Lear fueron desplazados ayer por la Gendarmería Nacional cuando querían cortar la estratégica Panamericana para reclamar que se reincorporen a los despedidos por la compañía.
Cortes y disputa - El conflicto en Lear se extendió a la Panamericana.
Trabajadores de la autopartista Lear fueron desplazados ayer por la Gendarmería Nacional cuando querían cortar la estratégica Panamericana para reclamar que se reincorporen a los despedidos por la compañía.
Varios manifestantes quedaron heridos a causa de los impactos de bala de goma y, desde el acampe que todavía realizan cerca de la autovía en General Pacheco, denunciaron que recibieron amenazas y presiones para que se retiren de la zona.
A fines de mayo, la empresa Lear suspendió a 330 obreros de los 650 que trabajaban allí. Posteriormente, fueron despedidos 200 trabajadores y el resto volvió a sus puestos de trabajo. Lear justificó los despidos alegando una crisis económica, algo que los trabajadores desmintieron debido a la producción que reflejó la planta por esos meses. Incluso, este argumento fue desestimado por el Ministerio de Trabajo, Carlos Tomada porque "la empresa no acreditó" tal situación de crisis. En protesta, los trabajadores iniciaron una serie de acciones en la puerta de la planta que luego fueron extendiendo a arterias fundamentales de Capital Federal y la provincia de Buenos Aires, como la autopista Panamericana y la General Paz. De los 190 despidos efectivos, 90 trabajadores llegaron a un arreglo económico con la empresa.
Varios manifestantes quedaron heridos a causa de los impactos de bala de goma y, desde el acampe que todavía realizan cerca de la autovía en General Pacheco, denunciaron que recibieron amenazas y presiones para que se retiren de la zona.
A fines de mayo, la empresa Lear suspendió a 330 obreros de los 650 que trabajaban allí. Posteriormente, fueron despedidos 200 trabajadores y el resto volvió a sus puestos de trabajo. Lear justificó los despidos alegando una crisis económica, algo que los trabajadores desmintieron debido a la producción que reflejó la planta por esos meses. Incluso, este argumento fue desestimado por el Ministerio de Trabajo, Carlos Tomada porque "la empresa no acreditó" tal situación de crisis. En protesta, los trabajadores iniciaron una serie de acciones en la puerta de la planta que luego fueron extendiendo a arterias fundamentales de Capital Federal y la provincia de Buenos Aires, como la autopista Panamericana y la General Paz. De los 190 despidos efectivos, 90 trabajadores llegaron a un arreglo económico con la empresa.
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