Campo: "Fue un paro extemporáneo y una acción de campaña electoral"
La Corriente Agraria Nacional y Popular (Canpo) calificó así al cese de comercialización llevado a cabo esta semana por las entidades que conforman la Mesa de Enlace.
"La convocatoria se produce en un contexto de emergencia hídrica que afecta a las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, noreste de Corrientes y Entre Ríos", remarcó la Canpo a través de un comunicado, donde indicó que "esta situación impactó directamente a productores agropecuarios; sin embargo se sostuvo la medida de fuerza con clara participación y declaraciones propias de una campaña electoral".
El movimiento que conduce Guillermo Martini subrayó que "mientras se desarrolla por cinco días el lockout patronal, organizaciones sociales y políticas trabajan junto a la población inundada", y añadió que "el Estado nacional declara la emergencia en zonas afectadas y destina fondos específicos y un conjunto de herramientas de políticas públicas para hacer frente a la misma".
En consecuencia, consideró que "el lockout se da en un contexto de baja generalizada de los commodities, similar a la ocurrida en ocasión de la crisis global de 2009", y destacó que "como en aquella ocasión, el gobierno nacional lleva adelante medidas para atender la situación de los productores tamberos, de fruta fresca y de trigo, que han sido impactados ante la caída de precios internacionales".
"Nuestros habituales compradores como China, Brasil, Rusia y la Comunidad Económica Europea atraviesan una crisis que los lleva a reducir la demanda de nuestros productos entre un 15% y un 35%", señaló la Canpo, al tiempo que puntualizó que "ante este panorama, el Estado nacional ha implementado líneas de crédito subsidiadas, aportes no reintegrables, así como subsidios a las cadenas de valor o las producciones regionales".
Así subrayó que "es incomprensible la participación en este lockout de organizaciones vinculadas al movimiento cooperativo -por la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro)-, un sector diezmado durante los años del neoliberalismo y que ha sido sujeto de las favorables políticas públicas diferenciadas desde el 25 de mayo de 2003 a la fecha".
Remarcó que "los derechos de exportación a la soja están siendo coparticipados por la Nación con las provincias y municipios, mediante el Fondo Solidario, particularmente importante frente a los desastres climáticos que se están produciendo este año, así como está volviendo a los pequeños y medianos productores agrícolas como aportes no reintegrables".
"Las políticas implementadas en los últimos 12 años llevaron a la cosecha argentina más grande de la historia: 123 millones de toneladas en esta última campaña 2014/15. Ese gran volumen está ayudando a sostener los ingresos de la cadena agroalimentaria frente al desplome de los precios internacionales", puntualizó la Canpo.
Por eso, consideró que "acotar la discusión acerca de la política agropecuaria reduciéndola a la eliminación de retenciones a las exportaciones es una expresión electoralista que oculta la pretensión de trasladar la crisis a los sectores más vulnerables".
Recordó que "durante la década de los ´90 no existieron derechos de exportación y desaparecieron más de 250.000 pequeños productores, 800 cooperativas agropecuarias, hubo 1.400.000 hectáreas hipotecadas y una deuda global del sector de U$S 8.000 millones".
"Frente a todas estas circunstancias entendemos que el único camino es del diálogo constructivo y con propuestas como las que aportan la Mesa Nacional de Cooperativas Agroalimentarias, la Federación Nacional de Agricultura Familiar o los Foros convocados por la Federación Agraria Argentina para continuar con la construcción de un destino compartido como nación", concluyó la Corriente.
Telam
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