Florencia Kirchner no quedará detenida: el juez federal Claudio Bonadio le concedió ayer la eximición de prisión a la hija de Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner en el marco de la causa conocida como Los Sauces, luego de que la ex mandataria presentara por la mañana un escrito solicitando esa medida y denunciara que el magistrado buscaba poner presa a la joven como parte de un plan de persecución político-judicial en su contra. Bonadio aceptó los argumentos planteados por el fiscal Carlos Rívolo, que horas antes había dictaminado a favor de que se haga lugar al pedido de CFK. En ese sentido, ambos entendieron que no existía peligro de fuga ni de entorpecimiento de la investigación que justifique una detención de Florencia Kirchner. Ella y su hermano, el diputado Máximo Kirchner, deberán presentarse a declarar por este expediente el lunes, mientras que un día más tarde lo hará la ex presidenta.
“Bonadio intentará privar a mi hija Florencia Kirchner de su libertad en la causa denominada Los Sauces”, escribió Fernández de Kirchner en su cuenta de Twitter ayer por la mañana, anunciando la presentación del escrito para pedir la eximición. “Dado que la crisis resulta ya inocultable, se pretende seguir avanzando en esa línea y generar nuevos episodios distractivos que alejen a la gente de los problemas   reales –agregó–. Si bien no existe el más remoto justificativo legal que pudiera sostener tan descabellada decisión, no es menos cierto que las barbaridades jurídicas que se vienen cometiendo impidan descartar desa-tinos aún mayores. Las pruebas están a la vista.”
CFK recordó que a su hija “se la acusa de haber formado parte de una supuesta organización delictiva que habría iniciado sus actividades en mayo de 2003”, cuando “Florencia contaba con tan sólo 12 años de edad”. Además, agregó que “incluso, a la fecha de constitución de Los Sauces S.A.” la joven “recién había alcanzado a cumplir sus 16 años” y que su relación “con dicha sociedad se inicia tras el fallecimiento de su padre, en el carácter de heredera forzosa”. La ex mandataria dijo que fue informada por fuentes en los Tribunales sobre la decisión de Bonadio de detener a su hija, decisión que atribuyó a “la descomunal campaña de persecución mediático-judicial” en contra suyo y de su familia.
“Todo esto viene ocurriendo mientras los problemas de los argentinos se siguen agravando con motivo de las políticas del actual Gobierno, situación que pretende ser ocultada y manipulada a través de la actuación coordinada de una alianza política, mediática y judicial”, advirtió en el escrito que presentó. Allí advirtió también que la causa Los Sauces fue abierta “pese a que se trató de una denuncia por hechos que ya eran materia de investigación en el marco de la causa Hotesur”.
Así “en forma absolutamente ilegal, se apoderaron y tergiversaron información que después fue utilizada por la diputada Stolbizer, una vez más, para promover falsas denuncias –agregó CFK–. Por su parte, el Poder Ejecutivo Nacional alimentó esta persecución a través de insólitos informes de ‘inteligencia’ practicados por la Unidad de Información Financiera”. Además, dijo que “se valieron del Tribunal de Tasaciones de la Nación para practicar insólitas valuaciones de inmuebles con la intención de dar verosimilitud a este proceso” y que “tampoco quedó al margen de esta operación la Administración Federal de Ingresos Públicos, conformando supuestos informes fuera del control de las defensas constituidas en esta causa”.
Finalmente, en respuesta a ese escrito, Bonadio se pronunció en la misma dirección que lo había hecho horas antes el fiscal Rívolo, y decidió que se haga lugar al pedido realizado por la ex presidenta por entender que no hay motivos para que Florencia Kirchner quede detenida el lunes luego de prestar declaración indagatoria en el marco de la causa en la que también está imputada su madre y su hermano, Máximo. 
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