Un bondi que no viaja más
La empresa Plaza, propietaria de la 36, planea absorberla dentro de la 141, de la que también es dueña y tiene un recorrido semejante.
La línea 36 de colectivos dejó de a pie a los más de 400 mil pasajeros que traslada mensualmente desde que dejó de funcionar un mes atrás. Según trascendió, la empresa aduce que no tiene dinero para cargar gasoil. Ayer, según informó a este diario un delegado de la línea, se sumó al conflicto el paro de los trabajadores por la falta de pago de los salarios, mientras contra reloj se negociaba durante la tarde la cesión de la línea a la 141, otra empresa del mismo grupo económico pero con una razón social diferente.
Las unidades rojas de la 36, del grupo Plaza, realizan un recorrido que une Villa Celina, en el partido de La Matanza, donde está la cabecera de la línea, con Plaza Italia, pasando por Villa Lugano, Floresta, Flores, Caballito, Almagro y Palermo. En el trayecto, los colectivos circulan por las cercanías de los hospitales Güemes, Durand, Naval, Curie, Méndez y el Hospital Italiano.
La línea, en la que trabajan alrededor de 130 personas, entre choferes, mecánicos e inspectores, es uno de los tantos asteroides del grupo Plaza, de los hermanos Cirigliano, que funciona bajo el nombre de Empresa de Transportes Mariano Moreno S. A. El último servicio fue el 2 de junio a las 5 de la mañana.
Daniel, uno de los dos delegados gremiales, explicó, antes de sostener una reunión con los directivos, que la línea “no funciona desde hace más de un mes porque la empresa cortó el suministro de gasoil”, y agregó que “ahora estamos parados también por la falta de pago. La empresa se comprometió a pagar los salarios hoy (por ayer)”.
Por la tarde, la empresa tenía pautada una reunión con el Ministerio de Trabajo, la Secretaría de Transporte y representantes de la Unión de Tranviarios Automotor (UTA) para gestionar la cesión de la 36 a la línea 141, también, de acuerdo al delegado, del grupo Plaza, que opera bajo la razón social de Mayo S.A.
Esta empresa se haría cargo de todo el personal de la 36, manteniendo la antigüedad y la categoría, según informó el delegado gremial, quien sostuvo que si la situación termina por resolverse, la semana que viene la línea, convertida en ramal de la 141, podría volver a funcionar.
El año pasado, en el marco del concurso preventivo, el grupo Plaza se desprendió de las líneas urbanas 61, 62, 114, 129, 133, 140 y 143 adquiridas por la empresa ZB Group, del empresario Marcelo Zbikoski, quien opera casi la totalidad de las líneas del transporte urbano de la zona metropolitana de Posadas, Misiones.
“El grupo Plaza sólo se quedó con la 36, que transporta unos 400 mil pasajeros por mes, y la 141 que tiene alrededor de 700 mil”, contó el delegado, y aclaró que “por la recesión económica bajó el número de pasajeros”.
“La empresa sostiene que el Gobierno no le paga los subsidios. En el conflicto, primero no le pagaron los sueldos a la 141 y ahora a nosotros”, sostuvo Daniel, y remarcó que “lo que nosotros queremos es mantener la fuente de trabajo y que la línea vuelva a circular”.
Según contó Manuel, un usuario que hizo reclamos ante la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT), al portal de noticias vecinal La Bocina, “el problema fue que la empresa Mariano Moreno tenía incumplimientos, el incumplimiento hizo que no le dieran gasoil subsidiado y ellos no van a pagar lo que vale el gasoil para mantener la línea, entonces la quieren suprimir, la quieren pasar a la 141 que no está penalizada”.
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