ONU: Cristina sentará posición en temas clave
Se espera que la presidenta se refiera a la crisis en Siria, respalde a Rousseff por el espionaje de los EE UU y reitere el reclamo por Malvinas. El otoño comenzó ayer con un domingo soleado en Nueva York. El tiempo agradable –del que disfrutan los neoyorquinos así como los miles de turistas que se apoderan de la ciudad– contrasta con el clima político que se anticipa para una semana muy compleja –tormentosa, se podría arriesgar– en los Estados Unidos, tanto en el plano interno como en el que los preocupa fronteras afuera.
El otoño comenzó ayer con un domingo soleado en Nueva York. El tiempo agradable –del que disfrutan los neoyorquinos así como los miles de turistas que se apoderan de la ciudad– contrasta con el clima político que se anticipa para una semana muy compleja –tormentosa, se podría arriesgar– en los Estados Unidos, tanto en el plano interno como en el que los preocupa fronteras afuera. Hacia adentro, un Barack Obama debilitado enfrenta una guerra en el Congreso que amenaza con jaquear su tan prometida reforma del sistema de salud (ver aparte), y en el plano externo, una Asamblea General de las Naciones Unidas en la que el conflicto sirio acaparará la mayor parte de los discursos y las discusiones privadas. Por si faltaba algo, se sumó la posibilidad de abrir negociaciones con el Irán post Ahmadinejad.
En este inestable clima político llegará hoy a "la gran manzana" –alrededor de las 9 de la mañana, hora argentina– la presidenta Cristina Fernández. Llega con una comitiva pequeña para una visita breve: partirá de regreso mañana por la noche, después de dar su discurso en la Asamblea.
No será una sesión más la de esta semana. Los temas formales, como la problemática del cambio climático y el desarrollo sostenible, darán lugar a los más urgentes, como Siria, el espionaje estadounidense sobre gobiernos amigos y un posible acercamiento a la nueva administración iraní.
Sobre estos temas prioritarios se anticipa que la presidenta argentina sentará posición. Respecto de Siria, ratificará su postura contraria a una salida militar como la que propuso –casi en soledad– la Casa Blanca. "La paz y la seguridad no son conceptos militares", señaló Cristina en agosto en este mismo escenario, al asumir la presidencia rotativa del Consejo de Seguridad de la ONU. La posición a favor de una solución política para poner fin a las matanzas que provoca la prolongada guerra civil en Siria es tan clara para la mandataria argentina como su rechazo a la utilización de armas químicas, provengan del bando que sea. Por eso, no sería extraño que se apoye la salida negociada que propuso Rusia para que Siria entregue sus armas químicas a la custodia internacional.
El de Siria no será el único tema sensible para el gobierno local. Se espera con gran interés el primer discurso de la Asamblea que corresponderá, como es habitual, al jefe de Estado brasileño. Todos esperan que Dilma Rousseff se refiera con dureza contra el espionaje informático que realizaron –¿realizan?– los servicios de inteligencia estadounidenses sobre el gobierno brasileño y empresas clave como Petrobras. "Las prácticas ilegales de intercepción de las comunicaciones y datos de ciudadanos, empresas y miembros del gobierno brasileño constituyen un hecho grave, que atenta contra la soberanía nacional", afirmó en un comunicado la Presidencia brasileña. Al no haber explicaciones satisfactorias por lo ocurrido, Rousseff suspendió su visita oficial a Estados Unidos programada para octubre. Pero el recinto de la ONU es otra cosa y allí se escucharán sus fuertes quejas.
Como también es habitual, el dueño de casa, Barack Obama, hablará en segundo lugar. ¿Responderá?, ¿dará alguna explicación de cara a muchos mandatarios presentes que sin duda alguna también son espiados? Estas preguntas tendrán una respuesta mañana.
Cristina hablará alrededor de las 18, hora argentina. Es muy probable que ratifique en la ONU su apoyo a Rousseff en este tema. La presidenta también hablará después de otro visitante que provocará muchísimo interés: el nuevo presidente iraní, Hasan Rohani. Lejos parecen estar aquellos días en que las provocativas intervenciones del anterior presidente, Muhmad Ahmadinejad, hacían que muchas delegaciones abandonaran la sala para manifestar su rechazo a un negador del holocausto judío. Rohani, un clérigo reformista, se posiciona en otra vereda que su antecesor, lo que provocó señales de acercamiento entre Washington y Teherán, gobiernos que hace 34 años no tienen relaciones diplomáticas, desde la revolución islámica que derrocó al sha.
¿Rohani se comprometerá a una revisión del plan nuclear iraní? En Nueva York algunos fantaseaban ayer con un posible encuentro entre Obama y Rohani. Más cerca de lo real, podría haber una reunión de cancilleres. De todas formas, es un cambio histórico, en momentos en que se ha vuelto crítica la situación en Siria, socio político y económico de Irán.
Esto interesa, y mucho, a la Argentina, ya que aún está pendiente por parte de Teherán la ratificación del Memorándum de Entendimiento para que declaren ante un juez argentino los iraníes acusados de participar del sangriento atentado terrorista contra la sede de la AMIA en 1994. Este acuerdo fue anunciado por Cristina el año pasado en este mismo escenario. Se prevé que insista mañana con la necesidad de que se sometan a los tribunales argentinos los sospechosos del atentado, pero sus conceptos dependerán también de lo que pueda anunciar Rohani, que la antecederá en el uso de la palabra. "Estamos expectantes, la posibilidad de que haya un cambio de actitud del nuevo gobierno iraní podría dar un importante impulso en la investigación del atentado. Hay que esperar para ver si se concreta", dijo a este diario Sergio Burstein, familiar de una de las víctimas del atentado terrorista, quien llegó ayer a Nueva York para presenciar la Asamblea General.
Por supuesto que la presidenta reiterará –como lo hicieron Néstor y Cristina desde 2003 en cada Asamblea General– sus reclamos hacia Gran Bretaña para que se siente en una mesa de negociación por la soberanía sobre las Islas Malvinas.
La presencia de la mandataria coincide también con que la próxima semana la Corte Suprema de los Estados Unidos iniciará el análisis de la aceptación o no de la causa que los fondos buitre iniciaron contra el Estado argentino, en reclamo del pago del ciento por ciento de los bonos en default. Posiblemente, Cristina explique la posición del gobierno argentino de pagarles al siete por ciento de los bonistas que no ingresaron al canje de deuda, razón por la cual se aprobó en el Congreso la nueva apertura del canje cerrado en 2010. "Somos pagadores seriales", había señalado, ratificando la idea de cumplir con lo adeudado, aun con los fondos buitre.
Muchos temas para un discurso, en una jornada de gran interés, como hacía tiempo que no ocurría en una Asamblea General de la ONU. «
los otros frentes
de obama
Barack Obama no sólo deberá escuchar críticas y acusaciones en la Asamblea General de la ONU. La Cámara de Representantes –de mayoría republicana– puso en jaque lo que queda de su promocionado plan de salud, conocido como "Obamacare", al aprobar el viernes pasado una iniciativa que le niega los fondos necesarios para su funcionamiento. Este bloqueo a los fondos públicos pone a la administración Obama al borde de no poder pagar su deuda a partir del 1 de octubre próximo. "Quieren mantener secuestrada a la economía", declaró un furioso presidente, que ahora apelará al Senado –donde tiene mayoría– para bloquear esta semana el ultimátum republicano.
La llamada "Ley de Protección al Paciente y Cuidado de Salud Asequible" fue uno de los ejes de campaña de Obama desde su primera presidencia. Pero el lobby ultraconservador nunca dejó que se aplicará en su totalidad, y ahora impide un aumento del gasto público con lo que pone en jaque las finanzas norteamericanas y en peligro de extinción al "Obamacare".
El Congreso no sólo lo pone en este aprieto financiero, sino que estuvo a punto de rechazar su pedido de atacar a Siria por la utilización de armas químicas. La intervención rusa salvó a Obama de un papelón interno y externo, pero el presidente demócrata tiene por delante un segundo mandato cargado de complicaciones.
el mítico empire state, a la venta
En estos días, los neoyorquinos están más interesados en una noticia doméstica que en la llegada de decenas de jefes de Estado para participar de la Asamblea General de la ONU. La próxima semana será puesto en venta lo que es quizá el símbolo más reconocido de la ciudad, el mítico Empire State Building. Este rascacielos, que fue el más alto del mundo, al que se subió King Kong y fue escenario de decenas de películas y series, se convertiría en una de las mayores operaciones inmobiliarias de los Estados Unidos. La familia Malkin es la propietaria del edificio, y en la primera semana de octubre pondrá a la venta 70 millones de acciones de la empresa Empire State Realty Trust, por las que piensa recaudar más de mil millones de dólares.
El Empire State se terminó de construir en 1931, y fue el edificio más alto hasta que aparecieron las torres del World Trade Center en la década del 70. Volvió al trono después de los atentados del 11 de septiembre, pero lo perderá cuando en un par de años se inaugure la One World Trade Center, que se levanta donde estaban las Torres Gemelas. Dos tercios de los ingresos del Empire State se generan por lo que pagan los cientos de visitantes que suben a su observatorio para obtener una de las postales más magníficas de la gran manzana.
El dato
Cambios en Irán
Hay expectativas sobre el discurso del presidente iraní Rohani, por su acercamiento a EE UU.
Tiempo argentino
2 comentarios:
Nuestra presidenta irá y presentará la misma postura firme y digna que siempre ha mostrado.
Ni ahí podría pensarse que Binner, Macri o Massita estuvieran a la altura de semejante circunstancia.
Hay una diferencia, Cristina es inigualable.
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