31 de enero de 2015


A modo de respuesta al reclamo que hizo Raúl Castro en la tercera cumbre de la CELAC

Guantánamo seguirá en poder de EE UU

La Casa Blanca anunció que, aunque se cierre el penal, no piensa desmantelar la base naval ni devolver la tierra.

Guantánamo seguirá en poder de EE UU
Conflictivo - EE UU alega que tiene un contrato de alquiler perpetuo desde 1903, por el que paga 4000 dólares anuales.
El gobierno de Estados Unidos no planea devolver a Cuba el territorio en el que se encuentra la base naval de la Bahía de Guantánamo, aunque el presidente Barack Obama consiga, tal y como ha prometido hacer, cerrar el centro de detención que allí se encuentra. "El presidente cree que la prisión de Guantánamo debe cerrarse, pero no así la base naval", dijo ayer en rueda de prensa el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest.
El funcionario aseguró que, por el momento, no existen conversaciones bilaterales al respecto, tras el histórico acuerdo de diciembre entre Washington y Cuba para restablecer relaciones diplomáticas, rotas desde el año 1961. Si bien aseguró que el territorio no será devuelto a La Habana, Earnest defendió, al igual que Obama, el cierre de la prisión de Guantánamo porque consideró que "sólo sirve como herramienta de reclutamiento para Al Qaeda y otras organizaciones extremistas en todo el mundo".
Las palabras del vocero de la Casa Blanca fueron una respuesta directa a lo dicho el pasado miércoles por el presidente cubano Raúl Castro, quien criticó, durante la III Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), las "injerencias" de Estados Unidos en su país en el marco del actual acercamiento diplomático. En esa oportunidad, el mandatario exigió a Washington el fin del embargo, una compensación justa por los daños humanos y económicos, el cierre de las emisiones de radio y televisión Martí, y la devolución del territorio que considera que está ilegalmente ocupado por la base naval de Guantánamo.
"Sus comentarios ilustran que hay una clara diferencia entre restablecer relaciones diplomáticas y llevar a cabo el proceso de normalización de las relaciones", dijo Earnest sobre las declaraciones de Castro. El vocero de la Casa Blanca dejó en claro que los desacuerdos entre ambos países todavía persisten, a pesar del deshielo diplomático iniciado en diciembre.
Obama prometió en varias ocasiones que antes de abandonar la Casa Blanca en enero de 2017 cerrará el centro de detención de Guantánamo, creado por el ex presidente George W. Bush para detener a los prisioneros detenidos en la guerra de Afganistán y sospechosos de pertenecer a Al Qaeda, la red terrorista fundada por el ya fallecido Osama Bin Laden.
Desde 2002, la prisión recibió un total de 780 presos, todos acusados de terrorismo. La mayoría de quienes habitan el controvertido penal  fueron detenidos durante la invasión estadounidense en Afganistán, tras los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001. Muchos nunca fueron juzgados. Desde entonces, 649 fueron trasladados a 55 países y 122 permanecen encarcelados en el centro de detención, denunciado por organismos internacionales que exigen su cierre inmediato debido a las torturas y las penosas condiciones de vida que sufren los reclusos. Entre los países que recibieron presos de Guantánamo se encuentran Uruguay (seis), España (cinco) y El Salvador (dos).
La base naval de Guantánamo se encuentra en el sureste de la isla. Cuba considera que es un territorio ocupado, pero Estados Unidos se niega a entregarlo, argumentando que tiene firmado un contrato de arrendamiento perpetuo de dicho territorio, en virtud del tratado cubano-estadounidense firmado hace más de un siglo, en 1903. Cada año, la Casa Blanca envía un cheque de apenas 4085 dólares para pagar el alquiler anual simbólico del territorio, que el gobierno de La Habana se niega a cobrar.  «
Tarjetas en la isla
Como parte de la renovación que tiñe las relaciones entre Estados Unidos y Cuba, las compañías emisoras de tarjetas de crédito American Express y MasterCard anunciaron que, a partir de marzo, sus plásticos se podrán usar en la isla. En sintonía, la representante demócrata por Minnessota, Betty McCollun, presentó un proyecto de ley para desactivar radio y TV Martí. "Son artefactos anticuados de la Guerra Fría", definió a las cadenas de propaganda anticastrista. El jueves, ocho senadores (cuatro demócratas y cuatro republicanos) presentaron además un proyecto para ampliar los viajes a Cuba.
Los representantes de ambos países se encontraron por primera vez en La Habana, la semana pasada, en lo que fue el inicio de la normalización de relaciones diplomáticas.
Tiempo argentino

No hay comentarios: