La AFIP pidió la detención de los directivos de Donnelley
La gráfica estadounidense habría fraguado un préstamo con su casa matriz por más de
$ 26 millones. Confirman que algunos accionistas son socios del fondo buitre NML Elliott.
$ 26 millones. Confirman que algunos accionistas son socios del fondo buitre NML Elliott.
Quiebra dudosa - Ricardo Echegaray, ayer, en la AFIP, con los detalles del caso de la gráfica estadounidense.
La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) denunció penalmente ante la justicia a los directivos locales de la gráfica estadounidense Donnelley, tras el hallazgo de una serie de irregularidades que ratifican –según el organismo– el carácter "fraudulento" de la quiebra, por lo que también solicitó la detención de los ejecutivos, algunos de los cuales ya se encontrarían actualmente fuera del país. El sábado 9 de agosto Donnelley realizó una Asamblea Extraordinaria de Accionistas en la cual resolvió presentar su propia quiebra, lo que fue formalmente solicitado dos días después en el juzgado Comercial 19, a cargo de Gerardo Santicchia. Sin más demora, ese mismo día el magistrado decretó la quiebra, que desde entonces tiene en vilo la estabilidad laboral de más de 400 trabajadores.
Según explicó en conferencia de prensa el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, los motivos esgrimidos por Donnelley para solicitar la quiebra contrastan con la "salud" financiera que muestran los registros contables. Más aún, la empresa habría pactado un préstamo ficticio con su casa matriz por $ 26.891.600, "sin ningún tipo de avales o garantías que permitan asegurar el cobro", maniobra que hoy forma parte de la denuncia que presentó el organismo y que tramita ante el Juzgado Criminal de Instrucción 2.
El 20 de agosto pasado la AFIP denunció el hecho ante el Juzgado Federal 3, a cargo de Daniel Rafecas, a cargo de la investigación por el supuesto delito de alteración del orden económico y financiero. De acuerdo a la presentación del organismo, a la cual tuvo acceso este diario, "la gravedad del hecho, su relevancia institucional, el carácter transnacional de la maniobra, la posibilidad de fuga de los imputados y el riesgo de entorpecimiento de la investigación" amerita "la inmediata detención" de los empresarios involucrados. El pedido, que eventualmente deberá resolver la justicia y que incluye la prohibición de salir del país a los directivos extranjeros, recayó sobre Jorge Martocq, Sergio Slep, Guillermo Lerario, Marcelo García, Pablo Damian Drager y Luis Jarlsson Bring, todos ellos autoridades de Donnelley Argentina durante el reciente período.
De acuerdo a los datos del último balance, Donnelley mantenía un patrimonio neto de 38,5 millones de pesos (con activos por $ 183,8 millones y pasivos por 145,2 millones de pesos). Echegaray aclaró que el patrimonio neto es positivo a pesar de que los inmuebles están registrados a valor libro y no a su valor real de mercado, por lo que "el activo sería muy superior". Al fundamentar la solvencia de la compañía, Echegaray aseguró que entre el 25 de agosto de 2013 y el 22 de agosto de 2014 Donnelley percibió $ 6.047.700 en reintegros por exportación, concepto bajo el cual tiene pendientes de cobro U$S 1.123.3000 que están en proceso de pago, y que mantenía ganancias reservadas para la futura distribución de dividendos por $ 20.232.833. El funcionario indicó además que Donnelley contaba con el certificado que otorga la AFIP (recién vencía en octubre próximo) y por el cual la compañía puede ser contratada por el Estado, es decir, no registra deudas con el fisco.
"No es un balance que permita pedir la propia quiebra, le sobraba caja", concluyó Echegaray, quien además se mostró sorprendido por la celeridad en que el magistrado Gerardo Santicchia, a cargo del juzgado comercial 19, decretó la quiebra. De hecho, según información de la página web del Poder Judicial de la Nación, durante el corriente año se registraron 1189 quiebras directas peticionadas, de las cuales sólo 36 fueron a pedidos del propio deudor (3%), con un tiempo promedio de 25 días entre la presentación y la resolución de quiebra. En ninguno de los casos se resolvió la quiebra durante el mismo día.
Durante su exposición, Echegaray confirmó los vínculos entre algunos de los accionistas de Donnelley (BlackRock, Capital World Investors, The Vanguard Group y State Street Corporation) y el fondo buitre NML Elliott, de Paul Singer si bien evitó referirse a la intencionalidad de estos fondos de inversión detrás de la quiebra. "Esos fondos están, no puedo decir nada más. Después cada uno hará su balance", dijo el funcionario, quien descartó de plano cualquier proyecto de estatización.
En tanto, mañana habrá una audiencia clave solicitada por el síndico que entiende en la quiebra, el estudio Risso Plastina y Asociados, con los principales clientes de Donnelley a fin de que manifiesten la voluntad de mantener el vínculo comercial con la imprenta.
Según explicó en conferencia de prensa el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, los motivos esgrimidos por Donnelley para solicitar la quiebra contrastan con la "salud" financiera que muestran los registros contables. Más aún, la empresa habría pactado un préstamo ficticio con su casa matriz por $ 26.891.600, "sin ningún tipo de avales o garantías que permitan asegurar el cobro", maniobra que hoy forma parte de la denuncia que presentó el organismo y que tramita ante el Juzgado Criminal de Instrucción 2.
El 20 de agosto pasado la AFIP denunció el hecho ante el Juzgado Federal 3, a cargo de Daniel Rafecas, a cargo de la investigación por el supuesto delito de alteración del orden económico y financiero. De acuerdo a la presentación del organismo, a la cual tuvo acceso este diario, "la gravedad del hecho, su relevancia institucional, el carácter transnacional de la maniobra, la posibilidad de fuga de los imputados y el riesgo de entorpecimiento de la investigación" amerita "la inmediata detención" de los empresarios involucrados. El pedido, que eventualmente deberá resolver la justicia y que incluye la prohibición de salir del país a los directivos extranjeros, recayó sobre Jorge Martocq, Sergio Slep, Guillermo Lerario, Marcelo García, Pablo Damian Drager y Luis Jarlsson Bring, todos ellos autoridades de Donnelley Argentina durante el reciente período.
De acuerdo a los datos del último balance, Donnelley mantenía un patrimonio neto de 38,5 millones de pesos (con activos por $ 183,8 millones y pasivos por 145,2 millones de pesos). Echegaray aclaró que el patrimonio neto es positivo a pesar de que los inmuebles están registrados a valor libro y no a su valor real de mercado, por lo que "el activo sería muy superior". Al fundamentar la solvencia de la compañía, Echegaray aseguró que entre el 25 de agosto de 2013 y el 22 de agosto de 2014 Donnelley percibió $ 6.047.700 en reintegros por exportación, concepto bajo el cual tiene pendientes de cobro U$S 1.123.3000 que están en proceso de pago, y que mantenía ganancias reservadas para la futura distribución de dividendos por $ 20.232.833. El funcionario indicó además que Donnelley contaba con el certificado que otorga la AFIP (recién vencía en octubre próximo) y por el cual la compañía puede ser contratada por el Estado, es decir, no registra deudas con el fisco.
"No es un balance que permita pedir la propia quiebra, le sobraba caja", concluyó Echegaray, quien además se mostró sorprendido por la celeridad en que el magistrado Gerardo Santicchia, a cargo del juzgado comercial 19, decretó la quiebra. De hecho, según información de la página web del Poder Judicial de la Nación, durante el corriente año se registraron 1189 quiebras directas peticionadas, de las cuales sólo 36 fueron a pedidos del propio deudor (3%), con un tiempo promedio de 25 días entre la presentación y la resolución de quiebra. En ninguno de los casos se resolvió la quiebra durante el mismo día.
Durante su exposición, Echegaray confirmó los vínculos entre algunos de los accionistas de Donnelley (BlackRock, Capital World Investors, The Vanguard Group y State Street Corporation) y el fondo buitre NML Elliott, de Paul Singer si bien evitó referirse a la intencionalidad de estos fondos de inversión detrás de la quiebra. "Esos fondos están, no puedo decir nada más. Después cada uno hará su balance", dijo el funcionario, quien descartó de plano cualquier proyecto de estatización.
En tanto, mañana habrá una audiencia clave solicitada por el síndico que entiende en la quiebra, el estudio Risso Plastina y Asociados, con los principales clientes de Donnelley a fin de que manifiesten la voluntad de mantener el vínculo comercial con la imprenta.
MOVILIZACIÓN. Los trabajadores de la imprenta Donnelley se movilizarán hoy por la mañana al Juzgado Comercial 19 de la Ciudad de Buenos Aires para exigir el pago de haberes y el levantamiento de la quiebra.
Tiempo argentino
No hay comentarios:
Publicar un comentario