El Presidente contra el cuerpo diplomático por el voto contra el bloqueo a Cuba
Javier Mieli: "A esos traidores a la patria los vamos a echar"
El Presidente continúa buscando culpables por el voto en la ONU cuando es más probable que sea una muestra más de las fallas en la gestión libertaria. La asunción de Werthein.
El presidente Javier Milei volvió a arremeter contra el proceso que llevó al delegado argentino ante Naciones Unidas a votar en contra el bloqueo a Cuba, un voto que estuvo en sintonía con 187 países y que sólo tuvo la oposición de dos países: Estados Unidos e Israel. “Estamos mucho en redes sociales --dijo el mandatario, en diálogo edulcorado con su pareja, Amalia González--. Eso permitió detectar el imperdonable error de la canciller (Diana) Mondino, que le costó el puesto en 30 minutos. Ahora estamos haciendo un trabajo en donde todos los responsables van a ser sumariados. Creo que directamente son traidores a la patria. Estamos viendo el formato legal por el cual echarlos, hacerlos pagar”. A media tarde, ya se hizo público que el nuevo canciller, Gerardo Werthein, que asumió este mismo lunes, le pediría la renuncia a toda la cúpula de la Cancillería, incluyendo secretarios, subsecretarios y hasta al vicecanciller Eduardo Bustamante. Werthein tendrá las manos libres para armar su equipo: algunos serán confirmados y otros relegados. El clima no será el mejor porque Milei, no sólo se lanzó contra funcionarios de Cancillería, sino contra los diplomáticos del mundo entero, a los que acusó de ser una burocracia internacional que respalda conceptos como la justicia social, la igualdad de género y la lucha contra el cambio climático. Pero, además, Milei dijo que habrá una purga, puesta en marcha por un sumario sobre el voto por el bloqueo.
Quienes conocen los mecanismos de las relaciones exteriores en la Argentina y del mundo sostienen que, en el supuesto sumario, el director de América Latina dirá que le informó sobre el voto al subsecretario de Política Exterior, éste al secretario de Política Exterior y éste a la canciller, de manera que no se encontrará allí delito ni irregularidad. No se desoyó ninguna orden superior. En todo caso, habrá que ver si Mondino le informó al presidente, a Karina Milei o a Santiago Caputo y éstos dejaron pasar la cuestión, ya sea porque se les pasó, porque significaba votar como lo hizo Argentina desde 1992 o porque querían hacerle pisar el palito a la ex canciller, para provocar su despido. En la purga tal vez recurran a congelar a diplomáticos, sacarlos de puestos importantes e incluso tal vez los manden a sus casas, sin darles funciones. Pero cualquier otra movida será ilegal, porque no se infringieron normas ni hubo accionar delictivo.
Siempre con Estados Unidos e Israel
“Yo siempre sostuve mi alineamiento con Estados Unidos e Israel: no podés ir a una votación en la que todos los países quedan de un lado y Estados Unidos e Israel quedan del otro. Nosotros teníamos que estar ahí, no del otro lado”, redondeó Milei en su visita al programa Empezar el Día, del canal Magazine.
El Presidente no se privó de una violenta crítica contra los que trabajan en las relaciones exteriores en el mundo: “Entiendo que estén enamorados de la burocracia internacional y, claro, viven una vida parasitaria y creen que 200 tipos pueden manejarle la vida a 8.000 millones. A mi me parece una locura, pero eso es la agenda woke (de justicia social, igualdad de género, lucha contra el calentamiento global), dentro de la agenda 2030 o el pacto 2045, que quieren avanzar sobre las libertades individuales y en donde un conjunto de imbéciles, fatalmente arrogantes, creen que le pueden manejar la vida al resto. Eso no lo voy a permitir. Entiendo que mucha gente de la Cancillería está enamorada de esto, pero si quieren manejar el país que vayan y ganen las elecciones”.
Lejos del mundo
Las posturas de este tipo dejan a la Argentina muy marginada. Todos los países entienden que votar en contra el bloqueo no es un respaldo al gobierno de Cuba, sino que se busca amortiguar el sufrimiento de los cubanos, azotados hace dos semanas por el huracán Oscar, ahora por la tormenta tropical Rafael y con enormes dificultades por cortes de energía. Hasta Hungría, Italia y El Salvador, que se sitúan en la derecha internacional, acompañaron las posturas contra el bloqueo norteamericano a la isla. También es un voto a la no-intervención de un país en otro, un principio defendido por la Argentina en toda su historia. Al mismo tiempo, el voto con la mayoría siempre constituyó una especie de moneda de cambio por el apoyo a la Argentina en la causa Malvinas.
Javier Milei afronta un peligro de aislamiento en la reunión del G-20 que se realizará en Brasil en este mes de noviembre, con Lula como anfitrión. Los mandatarios de varios países lo mirarán con desconfianza: la agenda del cambio climático, la igualdad de género y la justicia social es casi unánime. Tendrá que ver como surfea ese desafío, empezando por la mala predisposición del propio Lula.
En paralelo, parece evidente que en la Casa Rosada prenden velas para que Donald Trump se imponga en las elecciones de Estados Unidos. La esperanza es que el mandatario influya para que lleguen fondos del FMI que amortigüen la falta de dólares cuando se pase el efecto del blanqueo y se retiren los fondos de la bicicleta financiera. Esa ayuda no parece muy segura, pero parece más probable que Trump y Milei sintonicen en los postulados de derecha respecto de las mujeres, lo social y lo climático.
La cúpula de salida, pero no toda
La violencia con la que Milei se refirió a los diplomáticos se tradujo en la tarde del lunes en un supuesto pedido de renuncia de los altos cargos del Palacio San Martin, sede de la Cancillería. La mayor parte de los que quedaron en suspenso son cargos políticos, algunos incluso cercanos a Patricia Bullrich y a Mauricio Macri. Se supone que Werthein, que a diferencia de Mondino tiene diálogo con los hermanos Milei y Caputo, armará su propio equipo de confianza. Un escalón más abajo están los profesionales, que viven un estado asambleario porque desde hace una semana no escuchan más que amenazas. Se habla de purgas, pero también de que la Argentina abandonaría numerosas embajadas para reducir gastos. Se menciona una reducción muy fuerte en África, lo que le dejaría la cancha libre a Brasil en ese continente.
Poco sumario, mucha persecución
En la Cancillería funciona una Dirección de Sumarios que se ocupa, básicamente, de casos en los que hay ilegalidades o irregularidades. Los ejemplos más clásicos serían acosos sexuales o faltantes de dinero.
En la simulada entrevista de este lunes, Milei habló de un delito gravísimo: traición a la patria. Obviamente que no entra en juego. Consiste en beneficiar a un país que está en guerra con la Argentina y, como se sabe, la Argentina no le declaró la guerra a nadie. Es solo parte del show presidencial.
De manera que los sumarios -para echar a los que tuvieron relación con el voto a Cuba- chocarán con una cadena en la que no hay irregularidades, sino una falta de gestión -como ocurre en casi todas las áreas- de la propia administración Milei. Los funcionarios de línea dirán que ellos escribieron su dictamen; que esos textos se elevaron a los subsecretarios; el subsecretario alegará que lo mandó al secretario y que este se lo presentó, por correo electrónico, a la canciller. La fama de Mondino es que ella leía poco y nada. De manera que es posible que todo el tema se haya pasado por alto y que el embajador en Naciones Unidas, Ricardo Lagorio, recibiera el ok de repetir el mismo voto que la Argentina emite en este tema desde 1992. Es posible que Mondino no haya consultado a nadie -ella dice que la Casa Rosada estaba al tanto-, o tal vez el triángulo de los hermanos Milei y Caputo no le prestó atención y las cosas fluyeron de manera burocrática como en los últimos 32 años. Una vez más, el déficit de gestión disparó las cosas. También está la versión de que a Mondino le hicieron una cama para echarla, algo que igual iba a ocurrir, más pronto que tarde.
Es decir que serán sumarios sin delitos y sin irregularidades, con los que no se podrá fundamentar ningún despido, como pretende Milei.
Purgas ilegales
Durante todo el fin de semana, los medios alineados con el gobierno y el macrismo agitaron que empezarán entrevistas a todos los diplomáticos para ver cómo piensan y desplazar a todos los que “están en contra de la agenda de la libertad”, como escribió textualmente Milei en un comunicado.
Es una especie de patrulla de la ideología, totalmente contraria a la Constitución Nacional y es poco probable que alguien en la Cancillería se preste para realizar esas entrevistas. En todo caso, se crea un clima de choque y confrontación inédito dentro del cuerpo diplomático.
Como se percibió en el diálogo con su pareja, Milei apuntará a los diplomáticos como la casta, la burocracia que vive en el lujo y no hace más que respaldar la odiada agenda progresista. En verdad, la gran mayoría sintoniza con el PRO o las franjas más conservadoras del radicalismo, están lejos de cualquier progresismo y, además, los necesitará profesionalmente en la compleja arena internacional. De todas maneras, el gustito por el lujo se percibe más que nadie entre los libertarios: Milei, Karina y Victoria Villarruel en los recientes viajes a París, van a los mejores hoteles y juegan el papel de los nuevos ricos. No son solo las cafeteras de dos millones de pesos las que están de onda.
Pagina 12
No hay comentarios:
Publicar un comentario