Cuando la Criptoestafa estalló en The New York Times, Milei trata de distraer la atención usando crímenes horrendos para atacar a Kicillof
Caranchos
Un presidente denunciado en todo el mundo por estafador. Un dólar al borde del estallido. Inseguridad jurídica por el nombramiento de cortesanos por decreto. Y el uso miserable de un crimen horrendo.
Acorralado por las derivaciones de la estafa con las criptomonedas y la desesperación por contener el dólar para que la inflación estalle después de las elecciones, Javier Milei arremetió contra Axel Kicillof. Para atacar al gobernador bonaerense utilizó el artilugio más repugnante de la política, al caranchear el crimen horrendo de la niña Kim Gómez.
Aunque la SEC (el organismo norteamericano que se dedicaba a investigar este tipo de estafas en Estados Unidos) fue descabezada por Donald Trump, el Departamento de Justicia de ese país mantiene la investigación que involucra a Milei y a su hermana Karina.
En la sesión informativa que se efectuó en Diputados el martes, los especialistas demostraron que la estafa hubiera sido imposible sin la participación de Milei. En la cronología de los movimientos con $Libra fue evidente que los especuladores estaban sincronizados con el momento en que Milei publicó su respaldo a la criptomoneda en X y otras redes.
No fue una sincronización de días, sino de segundos. Milei colgó su respaldo (incluído el link para adquirir la cripto) a las 19.01. Segundos antes un grupo de operadores había comprado el 85 por ciento a un centavo. El respaldo de Milei multiplicó el valor y allí vendieron y estafaron a los que compraron de buena fe.
En la entrevista con Jonatan Viale aseguró que lo hizo por puro entusiasmo pero conocía a los organizadores, se había reunido con ellos. Ninguna ingenuidad. A los problemas judiciales por la estafa se sumaron los problemas políticos.
En la zona centro del país, donde Milei esperaba más votos, la estafa tuvo y tiene un efecto fuerte. Encuestas encargadas por los gobernadores de Córdoba y de Santa Fe, mostraron una caída importante en la imagen presidencial como reacción a la estafa con $Libra. En la primera, la caída fue de siete puntos, en tanto que en la provincia litoraleña llegó a los diez puntos.
Según estas cifras, el cordobés Martín Llaryora igualó a Milei, en tanto que Pullaro lo habría superado. Ambos gobernadores son socios de las políticas nacionales, pero disputan con el oficialismo en sus provincias.
Otras mediciones de carácter nacional mostraron una caída muy fuerte en la credibilidad de Milei, aunque la caída de su imagen es menor. De todos modos, estas mediciones indicaron que, al menos el respaldo del 30 por ciento del voto que lo llevó a la presidencia es muy tenue, sostenido, sobre todo, en el tema de la inflación.
El viernes a las siete de la mañana de Argentina, The New York Times publicó un informe que defenestró a Milei por el timo con las cripto. A los pocos minutos, el Presidente difundió el mensaje donde pidió la renuncia de Kicillof para intervenir la provincia. La horda de trolls presidenciales había lanzado su campaña el día anterior con miles de mensajes y fotos de Kicillof con el rostro ensangrentado. En parte es campaña y en parte para tapar el debate sobre la estafa y la situación económica.
Con el dólar el Presidente tiene otro flanco débil que no puede resolver. Muestra un índice falso de inflación a la que mide con una canasta en la que los servicios apenas figuran, cuando significan la mitad del gasto de un trabajador y aumentaron muy por encima de la inflación.
Y tiene un dólar planchado artificial. El JP Morgan informó que durante el 2024, el gobierno usó 21 mil millones de dólares para frenar el dólar. Al que se agregan 17 mil millones de dólares que pierde con el dólar blend de los exportadores. Son casi 40 mil millones de dólares en 12 meses para planchar el precio de la divisa. Son 3300 millones por mes.
Faltan siete meses para las elecciones y el gobierno se pone cada vez más nervioso por la demora del acuerdo con el FMI para que, además de postergar pagos, conceda un nuevo préstamo de once mil millones de dólares. Si se divide por siete, da más o menos la misma cifra que viene gastando por mes.
En plena crisis de los aranceles que este viernes hizo caer las bolsas en todo el mundo y que motivó los encuentros de mandatarios de Canadá, México y China con Donald Trump, Milei solamente pidió los dólares para salvarse hasta las elecciones. Nada para inversiones. Nada para defender el trabajo argentino, ya que los aranceles impactan en el acero y el aluminio que el país exporta a los Estados Unidos.
Los bancos anunciaron un dólar futuro a 1400 pesos, casi 50 por ciento más caro. Pero en realidad nadie sabe hasta dónde puede llegar una vez que lo libere. La devaluación forzada por la política económica del gobierno, terminaría de destrozar los bolsillos de los argentinos. El gobierno sabe que si devalúa perderá la mayor parte del respaldo y está desesperado para no hacerlo antes de las elecciones. Pero antes o después devaluará con lo que estallará un nuevo pico inflacionario.
Y otra vuelta de tuerca para un presidente que gobierna con decretazos ha sido designar en comisión en la Corte Suprema al juez Ariel Lijo y al abogado Manuel García Mansilla con lo que desató una gran controversia sobre la constitucionalidad de estos nombramientos. Pero si se pone en duda la legalidad de los jueces que integran la Corte, de la misma manera sucederá con los fallos que emita.
En un tiempo récord, menos de 24 horas, el presidente de la Corte, Horacio Rosatti tomó juramento a García Mansilla. Se suponía que Lijo y Mansilla se sumarían a Ricardo Lorenzetti para desbancar a Rosatti. Pero la velocidad con que Rosatti juramentó al hombre del Opus Dei, la clandestinidad que rodeó a la ceremonia y la presencia de Sebastián Amerio, viceministro de Justicia, hombre de Santiago Caputo y el verdadero poder en el ministerio, fue indicativo de una ardua negociación y cambio de posiciones.
Más allá de las internas, la vulnerabilidad legal no es un invento de la oposición. La Cámara de Comercio Argentina—Estados Unidos advirtió al gobierno sobre la inseguridad jurídica que generaría nombrar jueces de la Corte por decreto. Todos los fallos quedarían en zona oscura. No es el mejor escenario para los negocios.
La Constitución contempla este mecanismo en condiciones muy específicas que no aplican en esta circunstancia. Los pliegos de ambos están parados en el Congreso, --solo el de Lijo tiene dictamen de la comisión de Acuerdos--, porque el gobierno quiere la aprobación a mano alzada y no acepta debatir.
Esta es la situación: un Presidente investigado por estafas millonarias, el dólar al borde del estallido y un marco general de inseguridad jurídica.
Desde que el oficialismo lanzó la campaña le han buscado la vuelta a Kicillof. A principios de mes quisieron pegarle por la seguridad. Y justo se produjo la rebelión de los gendarmes, hubo nuevas fugas múltiples en CABA y en Santa Fe hubo varios asesinatos.
El tema de la inseguridad es un problema en todo el país. Según el mapa del delito que elaboró el ministerio de Seguridad de Nación, la provincia de Buenos Aires tiene casi la mitad de robos cada cien mil habitantes que la provincia de Córdoba y menos que CABA. Y bastante menos homicidios cada cien mil habitantes que Santa Fe. Pero los medios dominantes comparten con el oficialismo el ataque a Kicillof.
El ataque de Milei a Kicillof tuvo el efecto de distender la interna del peronismo y unificó a todos en respaldo al gobernador. Las conducciones del PJ bonaerense y del PJ nacional coincidieron en el respaldo de la misma manera que muchos intendentes.
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