18 de febrero de 2014

Una anciana de 77 años mató a un ladrón que entró a robar a su casa

La mujer escuchó ruidos en el fondo de su casa. Tomó un revólver que había en la vivienda y disparó. "Le pegué dos tiros y creo que lo maté", le dijo a un canal de televisión. La justicia dispuso que tenga custodia policial permanente.

Uno me dijo 'por qué no agarrás el chumbo'. Me acordé que tenía un revólver de mi marido y le dije 'querés chumbo, tomá'. Le pegué dos tiros, y creo que lo maté", contó con  la voz entrecortada la protagonista involuntaria de un nuevo episodio violento en Rosario. Se trata de una mujer de 77 años que se resistió a un asalto en su casa ayer a la madrugada en la zona sur de la ciudad y mató de un tiro a un delincuente.
El hecho ocurrió alrededor de las 6, cuando la dueña de casa, que sólo fue identificada como Irma, se encontraba durmiendo en su vivienda de la calle Centeno al 100, cuando la despertaron unos ruidos en el patio del fondo.
La mujer se levantó de la cama, primero vaciló y luego se asomó a ver qué ocurría. En ese momento vio que había uno o dos hombres que estaban intentando entrar a la vivienda por la puerta trasera.
"Estaba durmiendo y me desperté porque rompieron el vidrio de la puerta de atrás. Yo me levanté y pregunté: '¿Quién es?', y me dicen una palabrota feísima", indicó la anciana al canal de televisión Rosario 3 de esa ciudad.
La jubilada comentó que, con la puerta de por medio, se entabló una conversación entre ella y uno de los asaltantes, que aparentemente estaría bajo el efecto de alguna droga.
En medio de ese tenso intercambio de palabras, Irma recordó que ella tenía guardado un revólver que había pertenecido a su esposo y fue a buscarlo. La mujer no titubeó y efectuó dos tiros contra la puerta.
Los disparos tomaron por sorpresa al hombre con quien ella había hablado, quien resultó herido de gravedad en el hombro y quedó tendido en el piso de un patio interno sobre un charco de sangre.
"Ahí me dijo 'hija de puta' y se fue para allá. Caminó diez pasos y se cayó. Estaba tan drogado…", recordó al borde del llanto la mujer mientras señalaba el lugar donde se desplomó el ladrón.
Al escuchar los tiros y los gritos de la anciana, los vecinos se acercaron al lugar y cuando vieron al delincuente caído dieron aviso rápidamente a la policía, por lo que a los pocos minutos llegaron al lugar efectivos de la Comisaría 16, que tiene jurisdicción en esa zona.
El delincuente –cuya identidad no trascendió– fue llevado de urgencia al Hospital Roque Sáenz Peña de Rosario, donde agonizó algunas horas hasta que falleció a causa de las heridas recibidas.
En tanto, los efectivos policiales realizaron las tareas investigativas de rigor en la casa de la víctima e intentaban determinar si 

efectivamente existió un segundo asaltante que, al ver la puntería y la determinación de la jubilada, escapó del lugar abandonando a su cómplice herido.
Por otro lado, el fiscal de la Unidad Fiscal de Homicidios Dolosos, Pablo Pinto, que está a cargo de la causa, indicó que el revólver que usó Irma estaba registrado y con los papeles en regla.
"Como hace cuatro años que falleció mi marido yo me tengo que defender. Es la primera vez que me pasa esto. No sabía usar el arma y yo tiré porque otra no me quedaba. Si en ese momento no estaba me hubieran entrado a robar", sostuvo la anciana.
Ante la perspectiva de que hubiera otro delincuente involucrado y por la muerte del asaltante baleado, la justicia dispuso una custodia policial frente a la casa de la anciana, por si alguien intenta tomar venganza contra ella.
"Ahora me entero que parece que (el ladrón) murió. Yo pedí la custodia policial, porque tengo miedo", concluyó con una mezcla de angustia y temor en su voz.  «
 
 
El dato 
Legítima defensa
El fiscal Pablo Pinto determinó que Irma no fuera demorada ya que cree que en principio actuó en legítima defensa y además entiende que la mujer no entorpercerá la investigación y estará a disposición de la justicia.
Tiempo argentino

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